Las competencias organizacionales en dirección de proyectos se desarrollan en respuesta a muchos factores a lo largo del tiempo. Los desencadenantes pueden ser acontecimientos externos tales como la situación económica o la disponibilidad de nuevos métodos en el ámbito de la dirección de proyectos. Un acontecimiento interno puede ser, por ejemplo, la contratación de un nuevo profesional en dirección de proyectos, quien puede que organice el proyecto de una forma más eficaz. También pueden serlo el aprendizaje organizacional y las actividades de mejora continua usadas para mejorar las competencias organizacionales en dirección de proyectos. Una organización madurará gracias a esos desencadenantes, siguiendo una senda de desarrollo evolutivo.
La alta dirección juega un papel crucial en el análisis del estatus quo de la competencia organizacional en dirección de proyectos. Necesita establecer objetivos claros para desarrollos futuros (por ejemplo, establecimiento de metas estratégicas para la dirección de proyectos incluyendo aquellas para alcanzar la efectividad, eficiencia y mejor desempeño en general) y debe implementar las acciones apropiadas. La alta dirección debe establecer e implementar proactivamente los estándares para las competencias organizacionales en todos los elementos que integran la dirección de proyectos; debe monitorear y controlar la aplicación de estándares y favorecer el desarrollo sostenible. Este incluye, entre otros, usar las lecciones aprendidas de proyectos previos, construir comunidades de práctica para el personal de PP&P, intercambiar experiencias y hacer análisis comparativos de mercado de competencias organizacionales en dirección de proyectos con otras organizaciones relacionadas, tanto internas como externas.
La alta dirección debe prestar especial atención a los resultados alcanzados por los proyectos. Una herramienta para medir los logros en los proyectos es el Modelo de Excelencia de Proyectos de IPMA ® (IPMA PEB) que se usa para evaluar el desempeño de los proyectos para los Premios a la Excelencia de Proyectos de IPMA. El IPMA PEB está basado en el modelo de la Fundación Europea para la Gestión de Calidad (EFQM).
La figura muestra el modelo IPMA PEB. En su lado izquierdo contempla cinco criterios para la aplicación de la dirección de proyectos en un proyecto: la orientación hacia objetivos, liderazgo, personas, recursos y procesos. El lado derecho contempla los criterios para los resultados en un proyecto. Además de los resultados directos, también debe considerarse la satisfacción del cliente y de otras partes interesadas. Los resultados de tal evaluación pueden ayudar a un equipo de proyecto y a la organización a reflexionar sobre sus propias fortalezas y las potenciales áreas de mejora.
La alta dirección debe además monitorizar y controlar los resultados a medio y largo plazo de todos los programas (por ejemplo, la obtención de beneficios, cambios organizacionales), y carteras de proyectos (por ejemplo, los resultados financieros, el uso de recursos críticos) y su contribución a la misión, visión y estrategia de la organización.