Home

Primeros pasos de AEIPRO

Con motivo del vigésimo aniversario de la fundación de la Asociación Española de Ingeniería de Proyectos, el Dr. Juan Luis Cano Fernández, profesor emérito de la Universidad de Zaragoza y presidente de AEIPRO desde sus inicios hasta el año 2005, hace un recorrido por los años previos a la creación de nuestra asociación y sus primeros pasos.

Precedentes de AEIPRO

Jaime Blasco, catedrático de la UPC y Presidente del Instituto de Petroquímica, había sido desde el año 1985 el iniciador, animador y patrocinador de las reuniones de profesores de la recién creada área de conocimiento de Proyectos de Ingeniería, de cuya constitución tuvo también él mucha culpa. Las cuatro primeras reuniones tuvieron lugar en Barcelona. La quinta tuvo lugar en Valencia y la sexta en Almagro (Ciudad Real). Esta última ya se lanzó con el carácter de congreso.

El hecho mas destacado de esta época es que los profesores dedicados a la docencia de proyectos, repartidos por todo el territorio nacional, o no se conocían o el trato entre ellos había sido mínimo. Por esta razón, la acogida a estas reuniones fue excelente. Había interés en conocer lo que se estaba haciendo en otros lugares y compartir lo que se vivía en la docencia y en la incipiente investigación en Proyectos en las diferentes escuelas de ingenieros de Minas, Montes, Agrónomos, Caminos e Industriales de toda España.
Por otro lado, en los años finales de los 70 había surgido, promovido por Rafael Heredia, una asociación de corte profesional IDP (Instituto de Dirección de Proyectos), con la mayor parte de sus asociados vinculados a empresas de servicios de Ingeniería. Por causa de la crisis de esos años este intento tuvo una existencia efímera y ya a principios de los 80 había dejado de funcionar.

¿Cómo surgió la necesidad de AEIPRO?

La idea se empezó a pergeñar al cierre del séptimo congreso de Proyectos de Zaragoza, a mediados de 1991. Habíamos constatado que la acogida por participantes, empresas e instituciones había sido buena y como consecuencia nos preguntamos sobre la conveniencia de una asociación que sirviera de:

• Contacto permanente entre los socios, no solo del mundo académico sino con los de entornos profesionales vinculados con la forma de trabajar por proyectos a través de hacer cosas entre todos que supusieran un paso adelante a nivel corporativo.
• Puente para establecer contactos con los referentes internacionales mas afines como IPMA ( que por aquel entones se denominaba INTERNET) y PMI.
• Medio para facilitar la organización de los futuros congresos, que ya reunían alrededor de 120 participantes. Sin tener que “reinventar la rueda“ en cada convocatoria que es lo que pasaba hasta entonces.
Por otra parte teníamos clara la conveniencia tanto de localizar la asociación dentro de un ámbito universitario al objeto de disminuir los costes de instalación y mantenimiento, como de mantener el carácter rotatorio en la celebración de los Congresos. Esto último permitiría darse inicialmente a conocer por todo el país y que grupos geográficamente dispersos colaboraran.

Primeros pasos

El acto de constitución tuvo lugar en Madrid durante la reunión del año siguiente - Octubre 1992. Como fundadores se contó con: Jaime Blasco (UPC Proyectos ), Luis Olaortua (representando a IDOM), Carlos Morales (Heymo y UPM Construcción), Joaquín M. de Aguinaga (UPVasco Proyectos), Fernando Oliván (ingeniero profesional libre de Zaragoza), Angel Ramos y Santiago González (UPM Montes), J. José Medem (Estudio Medem y UPM Proyectos de Caminos), Eliseo Gómez–Senent (UPV Proyectos ), Ignacio Trueba (UPM Agrónomos), Manuel de Cos (Heymo y UPM Proyectos de Industriales ) y conmigo, Juan Luis Cano.
El nombre de la asociación (Asociación Española de Ingeniería de Proyectos, AEIPRO) incorporaba el término ingeniería de proyectos. Ingenieria entendida en sentido amplio de recoger el buen hacer en relación con la materia proyectual, se hiciera esta como se hiciera diseñando, realizando o gestionando.

Empezamos localizando la sede de AEIPRO en Zaragoza en un pequeño despachito del área de Proyectos del Centro Politécnico Superior de la Universidad de Zaragoza, con una ejecutiva cuyo Vice-Presidente era Manolo de Cos, el Secretario–Tesorero Fernando Oliván, yo actuaba de Presidente y la secretaria era María José Santamaría.
No se puede hablar de los inicios sin mencionar a María José Santamaría; la primera secretaria de AEIPRO, que permaneció en el puesto desde finales de 1992 hasta octubre de 2005. Os conocía a todos, amable pero infatigablemente recordaba las anualidades retrasadas, me apremiaba cuando había que preparar los boletines y en los congresos se cuidaba del pequeño stand donde distribuía publicaciones a la vez que con su simpatía atraía nuevos socios. Debido a la escasez de medios económicos del arranque empezó como becaria hasta que estuvimos en condiciones de tenerla en condiciones laboralmente más ajustadas a su trabajo.

Relaciones con IPMA , PMI y otras asociaciones

Se suscribió un acuerdo de colaboración con el PMI en 1997 que se volvió a ratificar en Noviembre de 2001. Fruto del mismo fue asumir la traducción de la versión de PMBOK del año 1996 al castellano.
En 1991 se habían iniciado los contactos con IPMA, y cuando en 1995 estuvimos en condiciones económicas de asociarnos, lo solicitamos. No obstante pese a ser miembros desde ese mismo año tuvimos rifirrafes dentro del Council debido a maniobras que allí se presentaron para no asegurarnos la representación en exclusiva de IPMA en España, lo que finalmente se consiguió dos años mas tarde. La presencia tanto en el Council of Delegates como en el Comité de Certificación la estuvimos manteniendo hasta 2004 Joaquín Ordieres, Javier Caamaño, Francisco Pérez Polo, Marcos Serer y yo.
Desde 1996 hasta el año 2001 se estuvieron manteniendo contactos con la AEPM (Asociación Española de Project Management) con vistas a conseguir alguna forma de integración, lo que finalmente no fructificó en resultado alguno.

Comienzos del Programa de Certificación

Pese a las numerosas dudas que teníamos en un principio sobre la aceptación que pudiera tener en el mercado español, el apoyo decidido de dos empresas IDOM y UNISYS permitió contar con los candidatos precisos para arrancar el programa, lo que nos permitió iniciar la certificación de acuerdo con el ICB V.02 de IPMA en el 2000.
Poner el carro en marcha costó no pocos sudores:
• Traducción y adaptación del NCB 01y del NCB 02.
• Preparación de exámenes.
• Preparación de la estructura administrativa del OCDP (Organismo Certificador de la Dirección de Proyectos).
• Elección y formación de evaluadores.
• Difusión del programa.
• Revisión de los expedientes de los candidatos a certificarse.
Al tiempo que fue necesario modificar los estatutos de la asociación con el fin de asegurar la independencia del OCDP. Asocio los sudores de poner en marcha el programa con los nombres de Manuel de Cos, Joaquín Ordieres, Paco Perez Polo y Javier Caamaño. Ana García se ocupó desde el inicio de toda la administración del OCDP.

Cosas que se fueron haciendo

Extraigo de la hemeroteca de la época (léase colección de hojas informativas y be@ de AEIPRO).
1995- Código Deontológico de la Ingeniería de Proyectos (Manuel de Cos y Adolfo Cazorla)
1998- Un equipo dirigido por Manuel de Cos llevó a cabo la traducción del PMBOK del PMI versión de 1996 de manera que en ese año, AEIPRO pudo publicar la “Guía de los Fundamentos de la Dirección de Proyectos”. La obra fue un trabajo muy serio que sirvió de herramienta de trabajo y consulta a todos los interesados. Incorporaba un excelente glosario de términos español – inglés en dirección de proyectos.
2001- Estado de situación y tendencias de la Ingeniería de Proyectos en España. Trabajo financiado por el Ministerio de Educación y Ciencia, publicado por AEIPRO. Participaron ocho universidades y cuarenta y nueve empresas.
2001- Entrada en funcionamiento de la web de la asociación.
2003- Acuerdo con el Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Industriales de España para la financiación de los congresos.

Presente y futuro de AEIPRO

A mi entender no se perciben razones para cambiar la razón de ser de la asociación.
AEIPRO debe ser un medio para que sus socios incrementen sus capacidades y, por ende, su profesionalidad. Un lugar donde sus socios sientan que les merece la pena pertenecer porque les da valor. A través de establecer contactos, de participar en grupos de trabajo, de tener acceso a programas de formación continuada, de acreditarse cuando se requiera y de colaborar en la marcha del programa de certificación ayudando al proceso de crecimiento de todos. En suma, de conseguir transmitir a sus socios el convencimiento de que están en una comunidad viva de profesionales, con independencia que el campo donde se desarrollen estos proyectos sea investigación farmacéutica o desarrollo de software.
En un momento donde el entorno español del asociacionismo con vistas a la integración europea está especialmente confuso, esa razón de ser no tiene porqué cambiar y sigue siendo tan válida como cuando se inició AEIPRO.
En la medida que persigamos y luchemos permanentemente por este afán, el porvenir de AEIPRO esta asegurado.

 
 
Pin It
  • Hits: 6473